La vida no es un camino recto… a veces parece más bien un laberinto sin salida. Hay días en los que parece que todo se pone en contra, en los que las caídas duelen más y las dudas intentan hacer nido en nuestra mente. Pero hay algo que marca la diferencia entre los que se quedan en el camino y los que alcanzan sus objetivos y sueños: la resiliencia. 💪🏼✨
La resiliencia no es solo resistir, es transformarse. Es la capacidad de levantarse después de cada tropiezo, de aprender de cada fracaso y de seguir avanzando con más sabiduría y determinación. No significa no sentir miedo, cansancio o frustración, sino saber que dentro de ti hay una fuerza mucho más grande que cualquier obstáculo. En otras palabras, es esa cualidad que nos ayuda a hacer frente a los obstáculos o decepciones sin desanimarnos, ahora, ¿cómo la adquirimos? Mediante la experiencia. Igual que un niño no aprenderá a montar en bici sin caerse alguna vez, tampoco aprenderá a salir adelante en la vida sin sufrir algún tropiezo.
Sugerencia: vea las cosas con equilibrio, piense en que puede hacer para mejorar, así podrá enfrentar los retos en lugar de hacerse la víctima. Por otro lado, no espere que alguien resuelva el problema/obstáculo/reto por usted, de lo contrario nunca aprenderá la lección! Entiendes el punto?
Piensa en cada persona que ha logrado algo extraordinario: grandes empresarios, atletas, emprendedores, soñadores… Ninguno llegó sin esfuerzo, sin derrotas y tampoco sin momentos de incertidumbre. Pero todos compartían algo en común: se negaron a rendirse.
Si hoy sientes que el camino se ha puesto pedregoso, ponte los zapatos adecuados! y recuerda que cada desafío es una oportunidad para crecer, que el éxito no llega de la noche a la mañana, sino como resultado de la pasión, la persistencia, y la resiliencia.
Hoy tienes el poder de escribir tu propia historia. Así que sigue adelante, con fe, con valentía y con la certeza de que lo mejor aún está por venir!!
Danny y Andrea López